El informe identifica amenazas como ciberataques y actividades de espionaje de actores de amenazas patrocinados por el estado y ciberdelincuentes en ambos sectores. Las cadenas de suministro, especialmente en lo que respecta a las redes 5G y las infraestructuras de energías renovables, corren un riesgo particular.
Para mitigar los riesgos detectados, el informe contiene recomendaciones a los Estados miembros, la Comisión y la ENISA para que apliquen oportunamente medidas de mejora de la resiliencia. Estas recomendaciones incluyen el intercambio de buenas prácticas para mitigar el ransomware, la mejora de la concienciación colectiva sobre la cibersituación y el intercambio de información; mejorar la planificación de contingencias, la gestión de crisis y la colaboración operativa; evaluar las dependencias de proveedores de terceros países de alto riesgo para reforzar la seguridad de la cadena de suministro.
El informe sigue las conclusiones del Consejo en las que se pide el desarrollo de la postura cibernética de la UE y da seguimiento al informe sobre la ciberseguridad y la resiliencia de las infraestructuras y redes de comunicaciones de la UE.
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