iStock photo Getty images plus
Věra Jourová, vicepresidenta de Valores y Transparencia, ha declarado:
La pandemia aún no ha terminado, por lo que queremos que las plataformas intensifiquen sus esfuerzos para hacer frente a la desinformación sobre la COVID-19, también en lo que respecta a las vacunas y en todas las lenguas de la UE. También esperamos que las plataformas traduzcan las lecciones aprendidas del programa de seguimiento de la COVID en un marco de seguimiento más sólido para el nuevo Código de lucha contra la desinformación.
Thierry Breton, comisario de Mercado Interior, añadió:
Los signatarios actuales y futuros deben trabajar juntos de manera eficiente y elaborar un código sólido. Las expectativas son elevadas debido a lo que está en juego y el tiempo es apremiante. Este Código será un claro punto de inflexión para adaptar la responsabilidad de las plataformas en línea garantizando medidas oportunas, adecuadas y eficientes para luchar contra la desinformación en la UE. El espacio informativo no debe ser un mundo occidental que exponga a los ciudadanos a un flujo de desinformación no manipulado.
Los últimos informes muestran que YouTube amplió su política de desinformación médica para incluir alegaciones sobre vacunas que contradicen el consenso de las autoridades sanitarias locales o la OMS. TikTok aumentó el número de palabras clave/hashtags que pueden activar etiquetas y pancartas relacionadas con la COVID-19 y las vacunas. Twitter actualizó su política sobre información engañosa sobre las vacunas. LinkedIn, de Microsoft, ha ampliado la colaboración con influencers en Europa para difundir mensajes autoritativos sobre la vacunación. Meta/Facebook ha actualizado sus políticas en todo el mundo sobre la vacunación infantil contra la COVID-19, por ejemplo, contenidos falsos que afirman que no existen vacunas para niños o que no son seguras ni se han probado.
Recientemente, 26 nuevos signatarios potenciales se han sumado al proceso de redacción para el refuerzo del Código de Buenas Prácticas en materia de Desinformación, que se espera ahora para finales de marzo de 2022. El plazo ampliado permitirá a los signatarios elaborar un instrumento sólido con compromisos detallados adaptados también a los diversos servicios representados por la gama más amplia de posibles signatarios. La Comisión insta a los signatarios a que lleven a cabo la revisión con rapidez, respetando sus orientaciones, y a que intensifiquen sus esfuerzos de seguimiento del programa, teniendo en cuenta las recientes recomendaciones del Grupo de Entidades Reguladoras Europeas para los Servicios de Comunicación Audiovisual (ERGA).